Ojos tus ojos,
Que me llaman en la incesante noche…
Noche tras noche,
Que te busca en mis pensamientos…
Pensamientos llenos de intriga y pasión
Pasión envuelta entre tus sábanas,
Esas sábanas, bañadas de risas…
Risas envueltas tras de mi,
De mí y de ti,
Son mis alegrías…
Alegría por verte,
Por sentirte entre mis brazos…
Brazos unidos al unísono
Con un despertar de tus caricias,
Caricias bañadas de ti
Alma mía.
Alma que me amas en mis noches,
Noches juntos, días tardíos…
Tardes y días junto a ti,
Entregaría mi alma
Por un siempre juntos
Mi dulce alma
Mi dulce hombre.
Por un decirte, por siempre jamás en tu mirar.
Mirada, tus miradas.
Corazones unidos en un mismo pensar.
Pensamientos unidos al mismo compás.
Tu compás soy y tu camino.
Acaríciame en tus días, Alma mía.
Para el Alma de mis adentros, él, sola él.
“No son letras, ni palabras”
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